Reconocido como toda una leyenda del alpinismo mundial por hazañas como el ascenso a diez montañas de más de 8.000 metros cumplidos los sesenta, Carlos Soria está a dos cumbres de cumplir el reto de convertirse en la persona de más edad en subir los catorce picos más altos del planeta. En unas semanas cumplirá 83 años y no tiene intención de parar. «Me da rabia cuando alguien dice ‘es que tengo setenta años’… ¿y qué?, la jubilación es a los 65 años, pero queda mucha vida por delante. La edad no es nada, hay que seguir viviendo y renunciar a las menos cosas posibles, adaptarse al momento que vives y disfrutar al máximo», ha defendido antes del encuentro con la tiradora Dóra Kiskapusi, presidenta del Club de Esgrima de Arroyo de la Encomienda (Valladolid), en la segunda jornada del V Foro de la Cultura.
Durante el diálogo titulado «Hasta el infinito y más allá», moderado por la periodista Marina Marcos y celebrado esta tarde en la iglesia del Monasterio de Nuestra Señora de Prado, el testimonio la joven Dóra Kiskapusi ha demostrado que la cultura del esfuerzo no es patrimonio de otras generaciones. La tiradora húngara emigró a España en 2008 y ha superado toda una carrera de obstáculos, incluida la imposibilidad de competir en olimpiadas hasta conseguir la nacionalidad. Subcampeona de Europa por equipos y ganadora de varios campeonatos de España, la deportista ha destacado que no se ha amedrentado ante las dificultades. «Las cosas no tienen que salir siempre como piensas. Lo importante es asumirlo y al día siguiente seguir adelante», ha señalado.
Dóra Kiskapusi ha sustituido en el encuentro al exnadador y el medallista paralímpico Enhamed Enhamed, en cuarentena por covid y que se sumó al acto a través de un vídeo. «De lo que más orgulloso estoy es de haber vuelto del Himalaya con todos los dedos, nunca me han tenido que sacar de la montaña, siempre he bajado por mi pie», ha subrayado Carlos Soria ante la pregunta que le ha lanzado desde la distancia Enhamed sobre la importancia de llegar a la cumbre y la importancia de volver a casa.
La montaña, el trabajo, sacar adelante a sus hijas… todo ha sido a base de esfuerzo, ha defendido el alpinista, quien ha confesado que le halaga el hecho de que muchos jóvenes montañeros lo consideren un referente. Carlos Soria ha dado pruebas de que además de la vitalidad mantiene también intacto el sentido del humor. Ante la pregunta de un asistente de qué se siente en la cumbre del mundo, el abulense fue contundente: «Unas ganas de bajar terribles».
INFORMACIÓN DEL ENCUENTRO
—EL COLOR DEL CRISTAL CON QUE SE MIRA. Sala de Cámara del Centro Cultural Miguel Delibes. 19.00 horas
Diálogo con FERNANDO TRUEBA, director de cine, guionista y productor, y DAVID TRUEBA, escritor, periodista, director de cine, guionista y actor. Modera: ANGÉLICA TANARRO, periodista.