El sacerdote y escritor Pablo d’Ors ha defendido que «la paz es el principal desafío del mundo» durante su diálogo en el salón de actos de las Cortes de Castilla y León, enmarcado en la programación previa del VI Foro de la Cultura, que se inaugurará mañana en el Teatro Calderón. «Vivimos en un mundo convulso, donde hay guerra, y el principal desafío es la paz», ha asegurado el autor de obras como Biografía del silencio y El estupor y la maravilla, que ha relacionado el devenir de la sociedad con el bienestar personal y ha pronosticado que «no habrá paz social sin fundamento, sin una paz interior».
Defensor de la meditación y la contemplación, D’Ors ha planteado que «quien empieza este camino, deja de buscar responsables y se apunta a sí mismo», una actitud que permite «darse cuenta de los males» que ocurren en la vida. «He venido a Valladolid para decir que acción y pensamiento están bien, pero, más importante que pensar y que actuar, es mirar, contemplar. ¿Qué pasaría si miráramos?», se ha cuestionado el sacerdote, para quien sólo hay dos alternativas a la hora de afrontar la vida. «O somos víctimas o somos testigos», ha asegurado para, después, incidir en que lo emocional y lo espiritual están interrelacionados.
En esta línea, D’Ors también ha destacado «dos mantras» que pueden ayudar a que su público pueda «reprogramarse interiormente». «Yo soy el arquero, nadie ni nada externo puede alterar mi paz, y no sufrimos por el mundo, sino por lo que pensamos por el mundo», ha defendido en una intervención jalonada de referencias a la filosofía oriental, muy presente en su obra y en íntima relación con su formación católica. «Sería muy hermoso que los cristianos y los budistas nos diésemos un abrazo», ha expresado.
Este camino de limpiar y sembrar la luz, ha asegurado, le ha conducido «de manera modesta, a cuatro frutos». El primero, ha explicado, es la «sincronicidad», un concepto que ha desgranado con la afirmación de que, cuando «la vida» le da a alguien lo que necesita, deja de desearlo. El segundo sería la «correspondencia», que eliminaría la tensión entre lo vivido y lo anhelado. El tercero pasaría por sustituir «el esfuerzo por la entrega», mientras que el cuarto se referiría a la salud. «Si entras en esta lógica de meditación y contemplación, tienes mejor salud, tanto a nivel físico como psíquico», ha defendido.
Tras su intervención, D’Ors ha conversado con la responsable de prensa de las instituciones jesuitas de Valladolid, Magdalena G. Parra, quien ha alabado de su interlocutor que «hace fácil lo difícil». «Lidia con la ambigüedad abiertamente, es pura antítesis: es palabra y es silencio», ha defendido la vallisoletana, que ha calificado al sacerdote como un «artista» del «arte de contemplar, de recrearse».
Diálogo con Pablo D’Ors